El cielo para el ganador

¿Cómo es posible que existan tantos dioses por el mundo con sus respectivas formas de adorarlo?

Uno podría pensar que todos están adorando al mismo dios pero que cada uno lo llama de una manera diferente: la misma mierda con diferente olor (salvando todas las estupideces que diferencian unas de otras).

Pero andá a plantearle a un practicante de la religión X que está adorando al mismo fantasmita que el de la religión Y. La respuesta es predecible y no se hace esperar: su dios es el verdadero y los demás están equivocados (imparcial, ¿verdad?). Queda demostrada una vez mas la mente cerrada de quienes tienen estas ideas metidas en la cabecita diminuta que dios les dio. Es increíble pero frente a planteamientos como este, demuestran todos ser más intolerantes que yo.

Porque si yo creyera, me creo una persona lo bastante inteligente como para darme cuenta de que todas las religiones monoteístas bien podrían ser la misma pero con diferentes métodos.

Esto plantea varias preguntas instantáneamente en la gente que piensa: ¿por qué dios no se dio a conocer a todos de la misma manera?, ¿por qué querría dios darles a los hombres esa duda que los divide y hace que incluso se maten entre sí?, ¿por qué exige sacrificios de diferente naturaleza a lo ancho del mundo? (me surgen mil preguntas más ahora mismo, pero quedan para más adelante).

En respuesta a los caprichos del “señor” se esgrimen frases como “los caminos del señor son inescrutables”, “es inmensa la sabiduría del señor”, o bien “los designios del señor bla bla bla…”; lo cual significa renunciar a saber la verdad dejándonos en manos del ser que justamente estamos sometiendo a prueba. Otra conclusión del estilo “dios es así porque dios sabe lo que hace y nosotros somos ignorantes, pero felices”, y nuevamente nos encontramos ante un FCR (Flujo Circular de Respuestas).

Ahora que ya que ha quedado claro de que filosóficamente dios tiene caprichos con consecuencias verdaderamente catastróficas para la humanidad, me pregunto si las matemáticas podrían servirme para algo en esta ocasión, y la respuesta es sí.

Si resulta ser que hay un dios verdadero entre todos los que andan por ahí, en ese caso prepárense todos los practicantes de las demás religiones, porque les espera el infierno. Pero la pregunta es ¿que mierda les hace pensar que tienen al dios correcto? Contando el número de religiones que hay, está claro que la probabilidad de adorar al dios equivocado es muy alta. Entonces ¿qué les hace pensar a los creyentes de la religión X que están en lo cierto? (Y el hecho de que existen muchas religiones no puede ser negado por nadie, sea de la religión que sea y sea lo fanático que sea).

La respuesta es clara (para ellos): la fe. Pero hay otra cosa clarísima: a unos cuantos millones les espera el fuego eterno. Es muy simple: para que unos ganen, los demás tienen que perder, no hay otra solución; y además es la perdición que se construyeron ellos solitos.

Uno también puede pensar que el dios los “salvará” a todos, sean de la religión que sean, en ese caso no sé que hacen desperdiciando su vida en oficios religiosos. De todas maneras es difícil de creer que el mismo sujeto que te desea lo peor del mundo (y además de manera injusta y tremendamente discrecional) venga algún día a salvarte.