Dos por tres veo noticias pelotudas como esta:
"Tiene 17 años, está grave y se niega a recibir una transfusión por religión" (Diario Clarín)
http://www.clarin.com/sociedad/grave-niega-recibir-transfusion-religion_0_969503104.html
No sé muy bien como viene la historia de los Testigos de Jehová con las transfusiones de sangre, supongo que se basarán en algun argumento bíblico bastante discutible, el tema es que cada tanto veo las palabras "testigos de Jehová", "transfusión de sangre" y "justicia" en la misma frase formando un titular, así que parece ser un problema bastante recurrente. Algún día lo investigaré más a fondo por curiosidad.
Lo que más me preocupa de esta noticia es que la interesada es menor de edad, y por lo tanto legalmente sus decisiones pueden chocar con la de sus padres haciendo la situación algo más compleja (en este caso ella no quiere y su madre la apoya, mientras que su padre no).
Desde el punto de vista personal (y como donante de sangre ocasional que soy) no entiendo muy bien como puede alguien negarse a un tratamiento médico que mejorará su salud en un momento delicado.
Por otro lado también defiendo la libertad de cada uno a decidir lo que le dé la gana, y más aún si solo afecta a uno mismo. Desde este punto de vista su decision (de la chica, no la de la madre por supuesto, la madre es la más pelotuda de la familia) no debería importarme demasiado. El punto crítico es que si llegado el momento de elegir entre muerte o transfusión elige muerte entonces algún dios en su infinita ambigüedad ha dejado que otra oveja haya tergiversado su mensaje (suponiendo que él o ella promueve el amor a su creación) para cagarse muriendo en su nombre. Obviamente todo esto suena muy idiota, pero lamentablemente creer en gansadas aleatorias da lugar a situaciones tan tristes como esta.
Como ya mencioné no entiendo muy bien la historia entre testigos de Jehová y medicina, pero si su dios hizo que alguien anónimo donara sangre, y la puso a disposición de la chica para curarse junto con un equipo de médicos a su lado para asistirla... ¿quienes son ellas para decir que Dios se está equivocando?
La justicia no debería verse en el aprieto de decidir por ella sobre su propia vida en una situación tan delicada. Y hay más, los ciudadanos argentinos pagan impuestos para mantener el sistema judicial que tendrá que encargarse de este caso... al final sus decisiones tienen trascendencia más allá de su persona.
En fin, no puedo evitar pensar en que hay ideas que sobran.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Dejá tu mensaje, si sos fanático, preparate para una lluvia de críticas.